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sábado, 17 de febrero de 2018

Descubren con rayos X una pintura oculta en un cuadro de Picasso





Esta obra, escondida en una pintura perteneciente al período azul del creador malagueño, fue descubierta gracias al uso de una avanzada tecnología de rayos X fluorescente que permite "no invasivamente" profundizar cada capa del lienzo, según los autores de El estudio. la reunión anual de la Asociación Americana para el Avance Científico, en Austin (Texas).
Un profesor de la Universidad de Northwestern (Illinois, Estados Unidos), Marc Walton, explicó que "la relación de amistad de ambos artistas y la similitud en el uso de las técnicas" sugiere que la pintura original pertenece a Torres-García.
Después de los primeros hallazgos en 1992, los expertos notaron que había colores que no coincidían con la pintura de Picasso, así como ciertos trazos en la mano de la figura en la pintura, lo que nos hizo pensar que se trataba de una lámina reutilizada.
"Esta nueva tecnología nos ha permitido entrar en la mente del artista y comprender cómo fue el proceso creativo del artista", explicó el profesor de la universidad.
Walton explicó que Picasso utilizó el paisaje "como fuente de inspiración" para dibujar la forma femenina, tomando como referencia las colinas en el fondo que se convertirían en el contorno de la espalda.
Actualmente, "Poverty Crouching" (1902) está expuesto en la Galería de Arte de Ontario, Canadá.
Por su parte, la directora de conservación e ingeniería del Instituto de Arte de Chicago, Francesca Casadio, dijo que también aplicaron esta técnica de investigación innovadora en 39 esculturas de bronce del autor, que se centran en el momento de la invasión nazi en París.
Casadio comentó que decidieron estudiar ese momento porque "en esos momentos los alemanes robaron los metales pesados ​​para sus infraestructuras", y sin embargo, "los centros de arte catalogan estas esculturas tal como se elaboran en dicho material".
La técnica de rayos X permitió saber que Picasso usó varios metales más dúctiles, como arcilla o yeso, para luego aplicar un recubrimiento de bronce.
"La ciencia nos permite ver qué hay dentro de las esculturas, cómo fueron hechas y cuándo fueron hechas", dijo Francesca Casadio.
En este sentido, el decano de la Facultad de Ingeniería y Ciencias Aplicadas Robert R. McCormick de la Universidad Northwestern, Julio Ottino, confirmó que gracias a esta tecnología portátil pueden estudiar las piezas sin tener que desplazar las obras de su lugar.
Para Ottino, este hecho favorece la cooperación entre las instituciones científicas y el arte, con el objetivo de tratar de descubrir cómo se materializó la inspiración de los artistas.